¿Qué es la diabetes?

La diabetes mellitus se refiere a un grupo de enfermedades que afecta la forma en que el cuerpo utiliza la glucosa en la sangre. La glucosa es una importante fuente de energía para las células que forman los músculos y tejidos. También es la principal fuente de combustible del cerebro.
La causa principal de la diabetes varía según el tipo. Pero, independientemente del tipo de diabetes que tengas, puede provocar un exceso de glucosa en la sangre. Demasiada glucosa en la sangre puede causar problemas de salud graves.
Las afecciones de diabetes crónica comprenden diabetes tipo 1 y diabetes tipo 2. Las afecciones de diabetes potencialmente reversibles incluyen prediabetes y diabetes gestacional. La prediabetes ocurre cuando tus niveles de glucosa en la sangre son más elevados de lo normal. Pero esos niveles de glucosa en la sangre no son tan altos como para ser denominados diabetes. La prediabetes puede convertirse en diabetes, a no ser que se tomen medidas para prevenirla. La diabetes gestacional ocurre durante el embarazo, pero puede desaparecer después de que el bebé nace.
Síntomas
Los síntomas de la diabetes dependen del nivel de glucosa en la sangre. Es posible que algunas personas no tengan síntomas, en especial, si padecen prediabetes o diabetes tipo 2. En el caso de la diabetes tipo 1, los síntomas tienden a aparecer rápido y son más graves.
Algunos de los síntomas de la diabetes tipo 1 y de la diabetes tipo 2 incluyen los siguientes:
- Sensación de estar más sediento de lo habitual.
- Micción frecuente.
- Pérdida de peso involuntaria.
- Presencia de cetonas en la orina, un producto secundario de la descomposición de músculo y grasa que se produce cuando no hay suficiente insulina disponible.
- Sensación de cansancio y debilidad.
- Sensación de irritabilidad u otros cambios en el estado de ánimo.
- Visión borrosa.
- Llagas que tardan en cicatrizar.
- Infecciones frecuentes, como infecciones en las encías, la piel o la vagina.
Si bien la diabetes tipo 1 puede aparecer a cualquier edad, suele manifestarse en la infancia o la adolescencia. La diabetes tipo 2 (el tipo más frecuente) también puede aparecer a cualquier edad, pero es más común en personas mayores de 40 años.
Cuándo debes consultar con un médico
- Si crees que tú o tu hijo tienen diabetes. Comunícate con el proveedor de atención médica si notas cualquier síntoma posible de diabetes. Cuanto antes se diagnostique la enfermedad, más rápido puede comenzar el tratamiento.
- Si ya te han diagnosticado diabetes. Después de recibir el diagnóstico, necesitarás un riguroso seguimiento médico hasta que tus niveles de glucosa en la sangre se estabilicen.
Para comprender la diabetes, es importante entender cómo el cuerpo usa habitualmente la glucosa.
Cómo funciona la insulina
La insulina es una hormona que proviene de una glándula situada detrás y debajo del estómago (páncreas).
- El páncreas libera insulina en el torrente sanguíneo.
- La insulina circula y permite que el azúcar entre en las células.
- La insulina reduce la cantidad de azúcar presente en el torrente sanguíneo.
- A medida que el nivel de glucosa sanguínea baja, también lo hace la secreción de insulina del páncreas.
La función de la glucosa
La glucosa, un tipo de azúcar, es la principal fuente de energía de las células que forman los músculos y otros tejidos.
- La glucosa proviene de dos fuentes principales: los alimentos y el hígado.
- La glucosa se absorbe en el torrente sanguíneo, en donde ingresa en las células con la ayuda de la insulina.
- El hígado elabora y almacena glucosa.
- Cuando los niveles de glucosa son bajos, como cuando no has comido por un buen rato, el hígado convierte el glucógeno almacenado en glucosa. Así mantiene tu nivel de glucosa dentro de un nivel normal.
La causa exacta de la mayoría de los tipos de diabetes se desconoce. En todos los casos, la glucosa se acumula en el torrente sanguíneo. Esto se debe a que el páncreas no produce suficiente insulina. Ambas clases de diabetes, tipo 1 y tipo 2, pueden causarse por una combinación de factores genéticos y ambientales. No se conoce realmente cuáles son estos factores.
Factores de riesgo
Los factores de riesgo para la diabetes dependen del tipo de diabetes que tienes. Los antecedentes familiares pueden desempeñar un papel en todos los tipos. Los factores ambientales y la geografía pueden aumentar el riesgo de padecer diabetes tipo 1.
En ocasiones, a los familiares de las personas con diabetes tipo 1 se les hacen análisis clínicos para comprobar la presencia de células del sistema inmunitario de la diabetes (autoanticuerpos). Si tienes estos autoanticuerpos, tendrás mayores probabilidades de padecer la enfermedad. Sin embargo, no todas las personas que tienen estos autoanticuerpos llegan a tener diabetes.
La raza o el origen étnico también pueden aumentar el riesgo de presentar diabetes tipo 2. Aunque no se sabe con certeza el motivo, determinadas personas, como las afroamericanas, las hispanas, las indígenas estadounidenses y las asiáticas americanas, corren un mayor riesgo.
La prediabetes, la diabetes tipo 2 y la diabetes gestacional son más frecuentes en personas con sobrepeso u obesidad.
Complicaciones
Las complicaciones a largo plazo de la diabetes aparecen progresivamente. Cuanto más tiempo hayas tenido diabetes (y cuanto menos te hayas controlado la glucosa sanguínea), mayor será el riesgo de sufrir complicaciones. Con el tiempo, las complicaciones de la diabetes podrían provocar discapacidad o poner en riesgo la vida. De hecho, la prediabetes puede provocar diabetes tipo 2.