5 razones para evitar la sal en la comida de los bebés

Cuando el bebé es alimentado exclusivamente con leche materna, a partir del sexto mes inicia la alimentación complementaria; los niños que por alguna razón han sido alimentados con leche de formula, inician con otro tipo de alimentos a partir del cuarto o quinto mes.

De acuerdo al desarrollo del bebé y las recomendaciones del pediatra o el especialista en nutrición, el bebé iniciará explorando con sopas, frutas y cereales, que progresivamente irán variando para reforzar su alimentación hasta completar las 6 comidas diarias: desayuno, media mañana, almuerzo, algo, comida y merienda. La gran preocupación de los padres es que el bebé coma y la principal sospecha de por qué puede rechazar los alimentos, radica en el sabor de las comidas sin sal.

Cuando los padres prueban las sopas de sus pequeños, se dan cuenta que el sabor no es agradable y que indiscutiblemente con un poco de sal sabría mejor pero hasta después de los 9 meses, incluso algunos especialistas recomiendan esperar hasta el año, se debe evitar la sal en las comidas del bebé.

• La sal puede generar en el bebé problemas de reflujo o gastritis.

• El bebé puede acostumbrarse a la dieta con sal y rechazar los alimentos que no la contengan.

• Los riñones del bebé no están preparados para procesar el sodio y el cloro que contiene la sal, lo que podría afectar su salud.

• La sal es causante de problemas de presión arterial en la edad adulta; evitar grandes cantidades de sal en las comidas, desde temprana edad, puede evitar este tipo de riesgos.

• Muchos de los alimentos que normalmente se le dan al bebé ya contienen sal.

Si no quieres que tu bebé rechace los alimentos por su sabor un tanto insípido, evita darle comida con sal, hasta que sea recomendado para su edad. Hay preparaciones que pueden tener mejor sabor que otras, busca recetas que sean del gusto de tu bebé, explora sabores con tu pequeño, te darás cuenta que algunos alimentos le gustan más que otros.

Pregunta a tu médico, qué ingredientes puedes utilizar para condimentar las comidas para que tu bebé las reciba con más gusto y recuerda, ante las dudas, siempre consulta con un profesional de la salud para que tu bebé no corra ningún riesgo.